Hace tiempo que no pasaba por aquí. No acabo de irme del todo, y cada poco pienso en todo el tiempo que hace que no paso por aquí, pero es que no quiero irme del todo.
Estos días estaba pensando en cómo empecé esto, en qué momento lo empecé, en qué sentía entonces que me llenaba o no me llenaba para escribir aquí cada semana, y qué es lo que me pasa ahora para no hacerlo. En aquel momento, hablo del año 2020, a mi bandeja de entrada llegaban dos, tres, cuatro newsletters a lo sumo cada semana. No sé si era yo que estaba suscrito a pocas o eran pocas las que se hacían. El caso es que lo veía como un mundo por explorar. Un lugar poco habitado aún, donde no habían entrado ni las marcas ni los medios de comunicación. Era un lugar pequeño en el que yo te escribía a ti, y tú me leías a mi. Después llegó el boom. Ahora a mi correo llegan dos, tres, cuatro newsletters al día, cuando no más. Muchas más. Y lo que era un lugar pequeño donde encontrarnos tú y yo, se convirtió en un lugar abierto al que llegaba mucha más gente. A veces ni se presentaban. A veces ni saludaban. Y la culpa no era suya.
Pero no solo esa masificación del medio fue lo que me ha ido echando atrás. Ni la saturación por la cantidad de contenido que se comparte. Hay algo más. Y ese algo más en el fondo soy yo. En aquel momento, aunque no siempre lo hacía de forma consciente, quería hablar de mí. Igual que muchos más de los que creaban, han creado y siguen creando newsletters. Pero esas ganas de hablar de mí se han ido diluyendo. Me he cansado de los libros de autoficción. Siempre con esas ganas de hablar de nosotros mismos, aunque disimulemos estar haciéndolo de otra cosa.
Creo que en el cansancio de las newsletters, porque creo que no es algo solo mío sino algo más general, hay un cierto cansancio del yo. Y no es solo algo que pasa con las newsletters. Es algo que pasa con todas las redes sociales, siempre centradas en nosotros mismos, en contar lo que nos pasa a cada instante. Cada tweet, cada story, cada reel no son más que pequeños relatos de lo que queremos que los demás vean de nosotros mismos. Durante mucho tiempo hemos centrado todos estos espacios en mirarnos y mostrarnos como algo diferente y como algo excepcional.
Tal vez se esté acercando la hora de salir y de dejar de mirarnos solo a nosotros mismos.
Ya va siendo hora.
Dejar que la fantasía, la ficción y la ilusión vuelvan. Que hay mucho más allá.
Toda persona que se dedique a la comunicación, sabe la importancia de crear contenidos que conecten con la audiencia de forma auténtica, emocional y sin ser invasivo.
Lograrlo, implica conocer exhaustivamente a la audiencia para poder generar contenidos alineados con sus intereses. Este es precisamente el objetivo del Posgrado en Branded Content de SHIFTA: investigar en profundidad a la audiencia y a partir de ello, crear, producir e implementar un plan de contenidos con el que realmente se sienta identificada.
¿Lo mejor? Al terminar el posgrado, contarás con una estrategia lista para ser implementada en tu propia empresa.
¡Empezamos en breve! ¿Te unes?
Algunas cosas interesantes
Second Hand Songs →
Me encantan las versiones. Permiten extraer de las canciones la esencia y llevarlas a otros registros totalmente diferentes. En esta web puedes conocer todas las versiones existentes de la canción que se te ocurra. De Billie Jean de Michael Jackson por ejemplo hay más de 200. Me ha hecho gracia la sección de versiones irreconocibles, como esta de Hey Jude de The Beatles.
The Talks→
The Talks es una revista online de entrevistas que se actualiza semanalmente con una entrevista y un retrato de una voz creativa de nuestro tiempo. Cuentan con una selección muy bien curada de entrevistas con personalidades de los campos del arte, el cine, la moda, el diseño, la música y los deportes. The Talks fue fundada en 2011 por Sven Schumann y Johannes Bonke.
Graphic →
Un tumbrl de los de toda la vida con sus cositas de diseño.
Civilian Projects →
Civilian es un estudio de diseño de interiores con sede en Brooklyn y que, como bien ellos dicen, trabaja con instituciones culturales, empresas con visión de futuro y personas creativas para contar sus historias a través del diseño. Me ha gustado mucho la web y alguno de sus proyectos, como este para la productora de documentales Sandbox Films en Nueva York.
Why every coffee shop looks the same →
El otro día me estuve dando un paseo por el centro de Madrid y a cada paso aparecía una nueva cafetería o lo que yo creía que era una cafetería, porque muchas veces aunque lo parecía era en realidad una peluquería. Se ha adoptado tanto un estilo que ya realmente da igual para que lo utilices. Funciona. O eso creen sus diseñadores, claro, porque al final lo único que se hace es repetir una y otra vez lo mismo en todos los lugares. Y da igual que sea Madrid que Buenos Aires o Nueva York.
Cosas bonitas
Hannah Lavesque es una artesana francesa que hace algo más que miniaturas de papel. Construye mundos y arquitecturas donde te gustaría quedarte a vivir llenas de sensibilidad y belleza.
Hablando de arquitectura, Carlos Flores fue un arquitecto nacido en Cuenca en 1928 y que recorrió España durante los años 70 fotografiando la arquitectura popular que estaba a punto de desaparecer. Os dejo varios enlaces a su trabajo, como este reportaje en El País (posible muro de pago) o directamente en el buscador de imágenes de Google.
Me ha gustado mucho el color y las formas de las ilustraciones en instagram de Tania Yakunova.
Recursos
New.Space →
Si estás cansado de WeTransfer, una alternativa que permite algunas funciones diferentes y bien diseñadas.
9 Best Online Video Editors For Creating Great Marketing Videos →
Si tienes que editar un vídeo y no sabes ningún programa profesional, existen muchos editores que ayudan a hacer ese trabajo. Aquí unos cuantos.
Una despedida
Anoche fui a ver en concierto a Salvador Sobral. Tal vez te suene por aquella lenta canción que ganó Eurovisión hace unos años. Fue una preciosidad, a parte de muy divertido porque Salvador es una persona muy espontánea y crea una atmósfera muy especial. De los mejores momentos, cuando entró su amiga Silvia Pérez Cruz y cantaron este tema lleno de ternura, emoción y sensibilidad.
Pero hay unas que hacen más ilusión que otras y que se leen siempre ;-)